Desde la discusión, aprobación y puesta en práctica del Plan Colombia, Ecuador ha sido víctima de la constante agresión del imperialismo estadounidense. Usando como punta de lanza al guerrerista gobierno de Álvaro Uribe, los Estados Unidos han utilizado el territorio ecuatoriano para el establecimiento de la Base Militar de Manta y la Escuela de Contrainsurgencia asentada en Puerto Francisco de Orellana (Amazonía ecuatoriana), con el fin de desarrollar acciones abiertas y encubiertas contra la justa lucha del pueblo colombiano y su expresión insurgente agrupada en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Con el propósito de involucrar al Ecuador en el conflicto interno colombiano y en aras de que el gobierno ecuatoriano desconozca la beligerancia que por la vía de los hechos han ganado las FARC entre los pueblos de Nuestra América, el fascismo colombiano, siempre en obediencia a los lineamientos del imperialismo estadounidense, ha recurrido a la provocación a través de acciones tales como: la ilegal captura y deportación a Colombia de Simón Trinidad y otros revolucionarios insurgentes de aquel país hermano; la acumulación de inteligencia militar desde la Base de Manta; la constante violación del espacio aéreo ecuatoriano por aeronaves de guerra colombianas; la penetración en Ecuador de agentes de la CIA, la DEA y los organismos de inteligencia colombianos; los atentados contra la población y el ecosistema de la frontera colombo- ecuatoriana a través de las fumigaciones aéreas.
Recientemente, y como corolario de dicho intervencionismo, se produce el criminal bombardeo en territorio ecuatoriano donde se asesinó al comandante Raúl Reyes, parte de su escolta, al ciudadano ecuatoriano Franklin Aisalla Molina y cuatro estudiantes universitarios : Juan González, Verónica Velásquez, Soren Avilés y Fernando Franco, y los 11 detenidos desaparecidos en dicho operativo. A partir de ese momento, no han cesado las continuas y falsas acusaciones contra el presidente Rafael Correa y funcionarios de su gobierno en el sentido de que brindan protección y apoyo a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, situación que ha ido acompañado de acciones de inteligencia con la intención de asesinar al Presidente Rafael Correa, donde han estado involucrados grupos operativos de la CIA, el DAS y los paramilitares.
Con la realización del Seminario Vigencia del Pensamiento de Simón Bolívar y los Próceres de la Independencia Latinoamericana y el Segundo Congreso de la Coordinadora Continental Bolivariana en la ciudad de Quito, entre los días 22 y 27 de febrero, se ha visto acelerada la artera y sistemática agresión contra la soberanía ecuatoriana por parte del gobierno fascista de Álvaro Uribe Vélez. En el Ecuador se ha desatado una campaña de intimidación y amedrentamiento por parte de la embajada norteamericana y los sectores apátridas y derechistas ecuatorianos contra las personas e instituciones que de una u otra manera contribuyeron a la realización efectiva de dicho Congreso.
Organizaciones de defensa de los derechos humanos han denunciado el asesinato por parte del ejército colombiano, en la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, de cinco campesinos ecuatorianos, a los que se los ha querido hacer pasar como miembros de las FARC-EP, así como la desaparición de un número indeterminado de personas. Estos hechos, coligados a la permanente campaña mediática de los monopolios informativos, nos hablan de una sistemática agresión a la soberanía ecuatoriana, buscando con ello la internacionalización del conflicto interno colombiano y, en particular, el involucramiento del Ecuador en la política guerrerista de Uribe y El Pentágono.
De esta manera, los largos y asesinos tentáculos del paramilitarismo uribista pretenden convertir el territorio ecuatoriano en escenario de la criminalización de quienes con firmeza y dignidad levantamos las banderas del intercambio humanitario, la solución política al conflicto interno colombiano, al respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos.
Desde la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB) expresamos nuestro más enérgico rechazo a estas acciones de intimidación y amedrentamiento, a la par que levantamos férrea unidad y solidaridad con los compañeros agredidos y las familias de los ecuatorianos asesinados y desaparecidos por el paramilitarismo uribista.
Saludamos las certeras y dignas acciones del gobierno ecuatoriano que, encabezado por el presidente Rafael Correa Delgado, ha enfrentado oportunamente la sistemática campaña contra el Ecuador orquestada por la administración Bush y ejecutada por Álvaro Uribe. El gobierno ecuatoriano ha refrendado así la defensa de la soberanía y la vida de los ecuatorianos.
Por nuestra parte, desde la CCB nos mantenemos incólumes en el cumplimiento de las tareas emanadas de nuestro Segundo Congreso hacia la construcción del Movimiento Continental Bolivariano. Empuñamos con decisión las banderas de nuestro padre Libertador, la construcción de la Patria Grande y la unidad de los pueblos de América Latina y el Caribe.
Porque en Bolívar, Alfaro, Manuelita Sáenz y Dolores Cacuango nos encontramos todos.
¡En Bolívar y nuestros héroes nos encontramos todos! Dirección Ejecutiva y Presidencia Colectiva
Coordinadora Continental Bolivariana hacia el Movimiento Continental Bolivariano.
Caracas, 24 y 25 de marzo del 2008
Con el propósito de involucrar al Ecuador en el conflicto interno colombiano y en aras de que el gobierno ecuatoriano desconozca la beligerancia que por la vía de los hechos han ganado las FARC entre los pueblos de Nuestra América, el fascismo colombiano, siempre en obediencia a los lineamientos del imperialismo estadounidense, ha recurrido a la provocación a través de acciones tales como: la ilegal captura y deportación a Colombia de Simón Trinidad y otros revolucionarios insurgentes de aquel país hermano; la acumulación de inteligencia militar desde la Base de Manta; la constante violación del espacio aéreo ecuatoriano por aeronaves de guerra colombianas; la penetración en Ecuador de agentes de la CIA, la DEA y los organismos de inteligencia colombianos; los atentados contra la población y el ecosistema de la frontera colombo- ecuatoriana a través de las fumigaciones aéreas.
Recientemente, y como corolario de dicho intervencionismo, se produce el criminal bombardeo en territorio ecuatoriano donde se asesinó al comandante Raúl Reyes, parte de su escolta, al ciudadano ecuatoriano Franklin Aisalla Molina y cuatro estudiantes universitarios : Juan González, Verónica Velásquez, Soren Avilés y Fernando Franco, y los 11 detenidos desaparecidos en dicho operativo. A partir de ese momento, no han cesado las continuas y falsas acusaciones contra el presidente Rafael Correa y funcionarios de su gobierno en el sentido de que brindan protección y apoyo a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, situación que ha ido acompañado de acciones de inteligencia con la intención de asesinar al Presidente Rafael Correa, donde han estado involucrados grupos operativos de la CIA, el DAS y los paramilitares.
Con la realización del Seminario Vigencia del Pensamiento de Simón Bolívar y los Próceres de la Independencia Latinoamericana y el Segundo Congreso de la Coordinadora Continental Bolivariana en la ciudad de Quito, entre los días 22 y 27 de febrero, se ha visto acelerada la artera y sistemática agresión contra la soberanía ecuatoriana por parte del gobierno fascista de Álvaro Uribe Vélez. En el Ecuador se ha desatado una campaña de intimidación y amedrentamiento por parte de la embajada norteamericana y los sectores apátridas y derechistas ecuatorianos contra las personas e instituciones que de una u otra manera contribuyeron a la realización efectiva de dicho Congreso.
Organizaciones de defensa de los derechos humanos han denunciado el asesinato por parte del ejército colombiano, en la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, de cinco campesinos ecuatorianos, a los que se los ha querido hacer pasar como miembros de las FARC-EP, así como la desaparición de un número indeterminado de personas. Estos hechos, coligados a la permanente campaña mediática de los monopolios informativos, nos hablan de una sistemática agresión a la soberanía ecuatoriana, buscando con ello la internacionalización del conflicto interno colombiano y, en particular, el involucramiento del Ecuador en la política guerrerista de Uribe y El Pentágono.
De esta manera, los largos y asesinos tentáculos del paramilitarismo uribista pretenden convertir el territorio ecuatoriano en escenario de la criminalización de quienes con firmeza y dignidad levantamos las banderas del intercambio humanitario, la solución política al conflicto interno colombiano, al respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos.
Desde la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB) expresamos nuestro más enérgico rechazo a estas acciones de intimidación y amedrentamiento, a la par que levantamos férrea unidad y solidaridad con los compañeros agredidos y las familias de los ecuatorianos asesinados y desaparecidos por el paramilitarismo uribista.
Saludamos las certeras y dignas acciones del gobierno ecuatoriano que, encabezado por el presidente Rafael Correa Delgado, ha enfrentado oportunamente la sistemática campaña contra el Ecuador orquestada por la administración Bush y ejecutada por Álvaro Uribe. El gobierno ecuatoriano ha refrendado así la defensa de la soberanía y la vida de los ecuatorianos.
Por nuestra parte, desde la CCB nos mantenemos incólumes en el cumplimiento de las tareas emanadas de nuestro Segundo Congreso hacia la construcción del Movimiento Continental Bolivariano. Empuñamos con decisión las banderas de nuestro padre Libertador, la construcción de la Patria Grande y la unidad de los pueblos de América Latina y el Caribe.
Porque en Bolívar, Alfaro, Manuelita Sáenz y Dolores Cacuango nos encontramos todos.
¡En Bolívar y nuestros héroes nos encontramos todos! Dirección Ejecutiva y Presidencia Colectiva
Coordinadora Continental Bolivariana hacia el Movimiento Continental Bolivariano.
Caracas, 24 y 25 de marzo del 2008
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